Otro de los ilustres entrenadores del equipo fue Javier Irureta, quien ganó el único campeonato de liga de la historia blanquiazul, la Copa del Rey recordada como «el centenariazo» (frente al Real Madrid Club de Fútbol, en su estadio, el día que cumplía cien años) y con el que consiguió cinco participaciones consecutivas en la Liga de Campeones. En la Alta Edad Media los trajes religiosos se diferenciaban de los civiles en que eran más largos y de colores austeros; en cambio, los ropajes litúrgicos eran de materiales finos y colores brillantes.