Allí defendió la camiseta de la Universidad Católica, consagrándose como campeón de la Copa de dicho país en 1991. Su buen rendimiento en el equipo cruzado le abrió las puertas del viejo continente. Cuenta en su palmarés con la edición de 1984 de la desaparecida Copa de la Liga, así como con tres campeonatos de Segunda División y cuatro de Tercera.